lunes, diciembre 03, 2007



San Miguel rueda 'Azaña', sobre el Presidente de la República durante el golpe de 1936


El director de cine vasco Santiago San Miguel Querejeta rueda en Madrid ‘Azaña’, una película sobre el líder político republicano, que es interpretado por Jordi Dauder (en la imagen).

La película se centra en las jornadas del 18 al 21 de julio de 1936 y de cómo vivió Manuel Azaña (Alcalá de Henares, 1880-Montauban, Francia, 1940) el golpe de Estado desde los despachos.

San Miguel Querejeta llevaba 25 años acariciando la idea de dedicar una película al líder republicano que mantuvo las riendas del Gobierno español durante la etapa más problemática de la historia contemporánea, el arranque de la Guerra Civil.

“No se trata de hacer una película documental sobre la Guerra Civil ni narrar la vida de Azaña, sino del contexto” en el que se movió y vivió el personaje histórico. Por lo tanto, el personaje del político se sitúa en los espacios en los que se movía, entre ellos, el Palacio Real de Madrid. “Todo han sido facilidades por parte de Patrimonio Nacional” para rodar en estos lugares, subraya San Miguel.

“Sólo faltaba que nos opusiéramos a un rodaje sobre la República aquí en palacio: la historia de España es sagrada”, señala con deportividad Yago Pico de Coaña, presidente de la entidad estatal que administra el edificio regio.

El rodaje, que se despliega también en Guadarrama, va permitiendo descubrir facetas singulares de la rica y poliédrica personalidad del más intelectual de los políticos hispanos. El film no será una pura hagiografía, pues mostrará también episodios negativos, como los acontecimientos de Casas Viejas, en enero de 1933, que se saldaron con la muerte de 19 campesinos libertarios a manos de guardias civiles y de asalto, y que, según el director, “constituyen la mácula más adversa en la imagen del político madrileño”.

También se podrán ver momentos desconocidos de la vida de Azaña, como que, “ya muy gravemente enfermo, don Manuel padeció el suicidio de su médico, Palet, tras haberle demandado antes ayuda para afrontar su propio trance postrero”, o la ternura profesada por Azaña hacia su joven esposa, Dolores Rivas Cherif.

Con la inclusión de parte de un documental del asalto al Cuartel de la Montaña en Madrid por parte de las milicias republicanas, el director logra un juego ficción-realidad que muestra en la pantalla el proceso real de conversión de los actores en los personajes. Así, al principio de la película se ve “la transformación del actor Dauder en el personaje de Azaña”.

La narración fílmada incluye la figura Antonio Olot, personaje silencioso, que mantuvo una relación filial con Azaña y que desapareció tras la guerra. “Encarna a quienes viven la Historia sin figurar luego en su relato”, remarca Santiago San Miguel.

sábado, diciembre 01, 2007