El fascismo esta ganando cada día más medios para contaminar la sociedad, ahora a las cadenas de radio, televisiones de TDT y periódicos, tenemos que sumar al PP el cual para intentar tener unos votos más es capaz de lanzar su artillería contra los más débiles de la sociedad, los inmigrantes ilegales, a los cuales trata de delincuentes de manera genérica. Resulta gracioso que cientos de militantes del PP se aprovechasen de la mano de obra barata sean los mismo que ahora piden la expulsión. Todo se debe según a mi parecer por tres cosas:
1º – actualmente existe un paro alto, lo que hace que los parados acepten empleos por debajo de las condiciones, por tanto los empresarios pueden prescindir de los sin papeles.
2º- el debate de la seguridad es una buena red para pescar votos y los inmigrantes, según la derecha son los causantes de todos los males del país.
3º- el sin complejos que practica la derecha, hace que propongan cosas que nadie con un poco de ética se atrevería a preguntar.
Además todos estos movimientos esan alimentados por una serie de Nazis y Fascistas que crean o intentan crear opinión en los medios de comunicación, utilizando la mentira y el insulto. Pudimos ver la pitada orquestada el pasado 12 de octubre, la cual no tenia otro motivo que generar mal estar en la sociedad y crear un clima adverso.
Los que nos consideramos gente de izquierdas tenemos que esforzarnos por combatir a este resurgimiento fascistas, con los únicos medios que tenemos la verdad y la honestidad. No podemos permitir que las incomodidades creadas por esta penosa crisis, alimente el fascismo y volvamos a encontrarnos en la repetición de los años en los que el Nazismo y el Fascismo dominaban Europa.
Un cordial Saludo.
1 comentario:
En realidad, para combatir el resurgimiento de grupos xenófobos no hace falta ser de izquierdas, con ser una persona decente y comprometida con la sociedad es suficiente, digo esto porque no me gusta que se divida a España en dos partes; la parte de izquierdas y la de derechas pues en realidad hay muchas más; tantas como personas...
España ha recibido inmigrantes de forma masiva en comparación con otros países de nuestro entorno. Estos inmigrantes ocuparon los puestos de trabajo que no querían los nativos españoles como camareros, para cuidar ancianos, en el servicio doméstico, el trabajo agrícola, etc..
Hay que indicar que en esta crisis los inmigrantes son los más afectados pues tienen contratos temporales de baja cualificación y trabajan en los sectores más afectados como la construcción. Además estos inmigrantes en paro no tienen una red de apoyo familiar e incluso los que sigan trabajando serán vistos de otra manera por los trabajadores españoles en paro, ya que en el nuevo contexto sí podrían estar interesados en trabajar en tareas que antes rechazaban, pero las encuentran ocupadas por inmigrantes.
Tengo que decir que el argumento de que los inmigrantes aportan cotizaciones a la Seguridad Social y garantizan las pensiones de los españoles se verá cuestionado pues en realidad los inmigrantes reciben más que aportan al conjunto del Estado del bienestar, pues reciben educación, sanidad y prestaciones por desempleo con lo cual el saldo neto positivo deja de estar tan claro.
Este tipo de hechos pueden ser utilizados de forma malintencionada por grupos xenófobos creando una actitud de rechazo hasta ahora inexistente.. Sería recomendable aumentar el esfuerzo de integración cosa que no se hizo en la época de bonanza y de abundancia de recursos. Habría que diseñar un plan de integración de inmigrantes que les facilitase el aprendizaje del idioma, de las normas legales básicas, les diese orientación en la búsqueda de empleo y casa, etc. Tareas todas ellas que los inmigrantes realizan hoy como pueden, a menudo sujetos a todo tipo de abusos. Creo que aún estamos a tiempo de evitar la formación de guetos de exclusión, agrupados por nacionalidades.
Para finalizar tengo que indicar que no debe tratarse igual al inmigrante legal que al ilegal, ni pueden aplicarse de manera recurrente regularizaciones masivas, si no se quiere provocar ''efectos llamada'' indeseables.
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